En una noche inolvidable en la Caldera del Parque, Tarucas desplegó su mejor rugby y venció 41-21 a Selknam de Chile, en un partido vital para mantenerse en la pelea por las semifinales del Súper Rugby Américas. El equipo de Álvaro Galindo fue eficaz, contundente y supo sobreponerse a momentos de tensión para desatar la fiesta en las tribunas tucumanas.

La franquicia del norte se puso rápidamente en ventaja a los 6 minutos gracias a una gran jugada individual de Nicolás Roger, que habilitó con clase a Stefano Ferro para el primer try, convertido por el propio apertura. Sin embargo, la visita reaccionó pronto. Selknam aprovechó algunas infracciones de Tarucas y, con su clásico juego corto, Bruno Sáez apoyó el empate parcial.

El primer tiempo tuvo de todo: tries, patadas certeras, y muchas lesiones. En la visita, se retiraron Martín Sigren y Marcelo Torrealba, dos piezas clave. Y del lado tucumano, Tomás Bartolini salió con claros gestos de dolor. Fue un primer tiempo físico, intenso y con varios pasajes de tensión.

Luego de un penal de Roger tras infracción en el scrum, Tarucas estiró diferencias. Y minutos después, volvió a golpear con una jugada colectiva brillante que recorrió toda la cancha: Sarelli apareció como wing y apoyó el segundo try de los locales. Sobre el final del primer tiempo, Selknam volvió a descontar con un try de maul apoyado por Agustín Böhme, tras una gran patada 50-22 de Benjamín Videla. Al descanso, el resultado era ajustado: 17-14.

En el segundo tiempo, el ritmo bajó. El juego se tornó físico, de desgaste, hasta que llegó la jugada que rompió el molde: Benjamín Garrido tomó la pelota en mitad de cancha y abrió para Mateo Pasquini, que realizó una corrida memorable, eludiendo a cuatro defensores chilenos. Aunque fue detenido justo antes del ingoal, logró apoyar el tercer try de Tarucas. Y apenas minutos más tarde, tras un scrum demoledor, Santiago Aguilar –recién ingresado– anotó el cuarto.

Parecía que la historia estaba definida, pero Selknam no se rindió. Con un jugador menos por amarilla a Salvador Lues, aprovechó un error de manejo de Tarucas, forzó otra amarilla (esta vez a Pasquini por tackle alto), y apoyó un nuevo try de maul con Tomás Baguley como protagonista. A falta de diez minutos, el marcador estaba 31-21, y los chilenos aún soñaban con llevarse puntos bonus.

Sin embargo, sobre el final, llegó la estocada definitiva. Bautista Estofán interceptó un pase en campo rival y corrió solo para apoyar bajo los palos, sellando el triunfo tucumano. Luego, Roger cerró la cuenta con un penal certero para el 41-21 final.

Tarucas consiguió un triunfo clave que lo mantiene con chances firmes de meterse entre los cuatro mejores. Con dos partidos más como local y una visita a Cobras en Brasil, la ilusión está más viva que nunca. El próximo paso será el viernes, ante Dogos, en una Caldera que promete estallar de camisetas naranjas.